En el marco de la inauguración de la muestra temporaria SER MUJERES en la ESMA, testimonios para volver a mirar se realizó una maratón de charlas breves entre jóvenes feministas y mujeres vinculadas a este Centro Clandestino. Las participantes fueron Miriam Lewin, Ana Testa y Ana Soffiantini, sobrevivientes de la ESMA; Carolina Varsky, abogada querellante de la causa 1270; María del Carmen Roqueta, jueza del Plan sistemático de robo de bebés; Mercedes Soiza Reilly, ex fiscal de la causa ESMA unificada. Cada una de ellas dialogó con las jóvenes Juli Epstein, presidenta del centro de estudiantes del Nacional Buenos Aires; Antonella Costa, actriz; Malena Sánchez, actriz; Analía Cid, fotógrafa de Pandilla Feminista; Agnes Simon, artista y Emilia Giordano, socióloga y guía del Museo. Moderaron las periodistas Sonia Santoro y Florencia Alcaraz.
La primera charla la realizaron Analía Cid y Mercedes Soiza Reilly. Ambas eligieron la fotografía como hilo conductor. Soiza Reilly mencionaba que la fotografía repercute en cómo contamos la historia. En las audiencias se respira memoria. Analía Cid dijo que es muy importante que quede un registro. No es la verdad absoluta, porque la verdad se construye colectivamente.
La segunda charla tuvo a Ana Testa y Malena Sánchez como protagonistas. Ana Testa recordó: Estos tipos eran tan perversos… ya no estaba Acosta, estaba D’ Imperio, que hacía festejar los cumpleaños y nos traía maquillaje para que nos pintáramos. Algunas compañeras se negaron. En homenaje a ellas, nosotras tenemos que seguir hablando.
Miriam Lewin y Agnes Simon, conocida también como Femigansta, llevaron a cabo la tercer charla. Frente a la pregunta de Simón sobre qué es como sobreviviente la justicia y la reparación, Lewin señaló que la reparación completa no existe. Las heridas nunca cierran. La preparación de quien tiene que actuar frente a una víctima, debe ser sólida para escuchar, contener y dar una salida. En los juicios estábamos tan exultantes que se había condenado a los pilotos, pero no nos dimos cuenta que los delitos sexuales no se tuvieron en cuenta.
Para la cuarta charla se acercaron Ana Soffiantini y Juli Epstein. Soffiantini mencionó que la ESMA fue uno de los tantos lugares de espanto, pero también pasaron historias de amor y de ganas de construir. Sufrí acoso acá adentro y seguí siendo violada afuera, en mis ideas. Con la democracia nos fuimos reconstruyendo.
La quinta charla estuvo a cargo de Carolina Varsky y Antonella Costa. Costa se refirió a su experiencia durante la filmación de la película Garage Olimpo: el compromiso fue filmar sin conocer el guión, ya que en esa época la peor tortura era la incertidumbre. Marco Bechi, sobreviviente y director del film, nos hizo vivir esa incertidumbre, ni siquiera sabía que yo era la protagonista.
María del Carmen Roqueta y Emilia Giordano formaron parte de la sexta y última charla de la jornada. Fue muy difícil para mí trabajar con todos hombres, ser la única mujer jueza, dijo Roqueta, de 18 Tribunales Federales, era la única mujer. El derecho no pide héroes, pide personas como todos, fue difícil avanzar, poner los límites, como nos sale, como nos han dejado. Giordano se refirió al armado de la muestra temporaria: Cuando pensábamos la muestra, pensábamos cómo esa justicia no tuvo la capacidad de escuchar a esas mujeres.
Miriam Lewin sobre el final del evento, dijo: hoy es un día histórico, es un punto de inflexión, porque hoy el feminismo entró a este Sitio de Memoria para siempre.